Marina Puche /EGM |
Citas. Cualquier error puede ser corregido:
Puede ciertamente afirmarse que el ego* edificó su mundo sobre el pecado.
Únicamente en un mundo así podría todo ser a la inversa.
Ésta es la extraña ilusión que hace que las nubes de la culpabilidad parezcan densas e impenetrables. La solidez que los cimientos de este mundo parecen tener descansa en ello. Pues el pecado ha hecho que la creación, de ser una Idea de Dios, pase a ser un ideal del ego: un mundo que él rige, compuesto de cuerpos inconscientes y capaces de caer presa de la corrupción y decadencia más absolutas.
Si esto es un error, la verdad puede deshacerlo fácilmente, pues todo error puede ser corregido sólo con que se le permita a la verdad juzgarlo.
Pero si al error se le otorga el rango de verdad, ¿ante qué se podría llevar?
La "santidad" del pecado se mantiene intacta debido únicamente a este extraño mecanismo. En cuanto que verdad, el pecado es inviolable, y todo se lleva ante él para ser juzgado. Mas si es un error, es él el que tiene que ser llevado ante la verdad.
Es imposible tener fe en el pecado, pues el pecado es falta de fe. Mas es posible tener fe en el hecho de que cualquier error puede ser corregido.
T-19.II.6 (Texto, capítulo 19, apartado II, párrafo 6).
El personaje, el falso yo, la mente errada.
La idea de que al Hijo de Dios pueden sucederle cosas o situaciones, contrarias a su voluntad.
Como nada Eterno puede ser dividido ni separado, es simplemente una ilusión un sueño en la mente del Hijo de Dios que se percibe separado.
16. ¿Cómo debe pasar el día el maestro de Dios?
No hay comentarios:
Publicar un comentario