11º aniversario/Otro brindis desde el cielo/Eva Juan

Juego de Tronos, Daenerys Targaryen con dragones

11º ANIVERSARIO del AMOR con HUMOR. 

Otro brindis desde el cielo por la DOBLE CONSCIENCIA


Los Señores Dragón


Parafraseando a Antoine de Saint-Exúpery, “pido perdón a los niños por no  dedicar” estas líneas a una historia de fantasía... infantil. Asimismo, agradezco la inspiración de R.R. Martin, porque encontré en sus dragones la forma de dibujar una realidad supuestamente aterradora.

Me enamoré de la historia de los Sres. Dragón con “Fuego y Sangre”, ese universo paralelo en un período de guerras medievales donde las mujeres tienen cabida como guerreras, los segundos hijos adquieren protagonismo y dragones son símbolo de poder y fuerza. Así pues, he querido trasladar ese universo al mío personal.

Los dragones son criaturas enormes que causan tanta fascinación como miedo.

Sólo los poderosos pueden doblegarlos. Qué hay más terrible que el miedo, más implacable que la impotencia, más cruel que la condescendencia... y más fuerte que el instinto de superación? Se trata de un animal fiero, enorme, fuerte, implacable, poderoso... y es nuestro compañero de vida. Cuanto más grande es la bestia, más hay que trabajar para doblegarla. No hay victoria sin lucha... ni derrota sin rendición. Nos pusieron un huevo de dragón en la cuna al nacer, otros simplemente se toparon con él tras un incidente. No nos encontramos con un perrito, ni un polluelo, nos apareció esta bestia, pero, quien es capaz de doblegarla asimila algo más que su poder.

Así pues, exhorto a todos mis "camaradas de armas", alias "rotos", discas, tullidos (como muchos nos ven aunque pocos lo digan), a verse a sí mismos como grandes señores que dominan el cielo con sus fieras. A verse a sí mismos como
Sres. Dragón... después de todo, las prótesis, las ruedas y las muletas no son más que nuestra silla de montar.

Amor por el aprendizaje (gracias Edu), humor por las situaciones difíciles, consciencia por la bestia que intento dominar y doble consciencia para encontrar paz a lomos de un dragón.

Eva Juan.