Segundo día de clase / Encarna Martínez Marín

Abrazo de pareja

Al Primer día de clase le sigue el Segundo día de clase.

La directora, la señora Paciencia, alertó a Alegría de que una visita desde inspección educativa tendría lugar esa mañana.

El señor Control llegó sobre las 11, justo después de que todos los niños y niñas hubiesen entrado a clase después del almuerzo. 

Paciencia le recibió junto a Dudas, la psicopedagoga del centro. Ambas estaban muy excitadas y nerviosas. 

Le mostraron las instalaciones del centro y conoció a Entrañable, el cual le hizo turbarse por su manera de darle la mano y, sobre todo, por su mirada inocente. Le recordó a Perdido, un hermano suyo fallecido que vivió junto a Esquizofrenia, una pareja que encontró en su caminar por las drogas.

Pidió un vaso de agua, que gentilmente le ofreció Generosidad, la jefa de cocina.

Cruzando el patio hacia la clase de Alegría, respiró un aire distinto.
Lxs niñxs le esperaban sentados en sus pupitres atentos a las indicaciones de Alegría.
Habían preparado una canción de bienvenida, que había sugerido Misión, la profesora de música. 

La letra de la canción hablaba de Creencia, la mujer descubridora de "Las Fortalezas", un lugar repleto de tesoros empoderadores.
Cuando Control entró en el aula y comenzó a oír la canción, lágrimas de emoción rodaron por sus mejillas.
Al llegar a casa contó a su esposa, Ira, su encuentro con Entrañable y cómo lxs niñxs le habían emocionado con su cantar. 

Ésta escuchó atenta y tras el relato, toda su armadura se desplomó. Abrazó a su esposo y agradeció su sensibilidad, ya que en ocasiones era difícil la convivencia, pero siempre le hacía ver las cosas de otro modo.

Encarna Martínez Marín